Un tiempo en donde actúa la mano de Dios
Testimonio Dome Endara
Sin duda este tiempo ha sido muy particular para cada uno de nosotros, ha sido un tiempo duro, para unos más que otros, pero también ha sido un tiempo para ver la mano de Dios obrando. Para mí no solamente ha significado vivir este evento mundial como todos si no saberlo acoplar a mi tiempo de misión. Sin duda que al empezar mi Brecha en mi mente jamás se cruzó un escenario como este; tenía expectativas obviamente, como muchos de nosotros tenemos con la planes para nuestra vida, pero nunca imaginé la sorpresa tan grande que Dios me daría.
Para mí ha sido ver el propósito de Dios, muchas veces nos llenamos la boca hablando sobre esto, pero no vemos el alcance de esta palabra: PROPÓSITO, la razón de algo que nos lleva exactamente a donde Dios nos quiere.
¿Cómo ha sido cubrir la Brecha en pandemia? Con la mano en el corazón les puedo asegurar que me sorprende ver como Dios da la gracia en determinada circunstancia, los que me conocen saben lo ansiosa que suelo ser y mi reacción cuando algo no sale como estaba planeado, pero no les miento cuando digo que desde el primer instante fue tomar las cosas con serenidad y aceptar con gozo lo que el Señor me estaba dando, tal vez porque no alcanzábamos a imaginar que esto llevaría tanto tiempo, pero también tengo la certeza que Dios obró en mi corazón y me permitió tener la fortaleza para vivir un tiempo como este.
LA ESPERA Y EL PROPÓSITO
Evidentemente en este largo tiempo viviendo la pandemia ha habido altos y bajos, pero vuelve a mi mente la palabra PROPÓSITO y descubrir como Dios me preparó para llegar aquí, fue un tiempo largo de espera para ver mi sueño de la Brecha cumplirse, pero ese tiempo de espera (tiempo en que la tesis oh sorpresa no salió como ni en el tiempo que esperaba) fue realmente el preámbulo para esta aventura y parte de ese PROPÓSITO.
Por último puedo decir que lo más reciente que el Señor me ha permitido descubrir es lo milagroso de la renuncia, porque aunque he tenido paz para aceptar lo que está pasando era necesario renunciar a ese ideal de brecha que aún tenía en mi mente para abrazar la Brecha que Dios quería para mí, no como yo la soñé sino como Él la soñó desde siempre para mí. Ese renunciar dolió mucho y me costó una tarde de lágrimas a mares con mi RP, lo plasmé en una carta y verdaderamente lo solté. Pero Dios es tan amoroso que aquello que yo dejé ir pensando que tal vez no lo iba a vivir me lo ha venido dando de a poco y ha sido más gratificante porque sé que es un regalo que viene de Él y por eso lo atesoro aún más.
Por ahora sigo trabajando en tener un corazón abierto para lo que el Señor tenga preparado para mí en este tiempo y creo que todos deberíamos trabajar en ello.
¡Bendiciones!
Dome Endara, Brechista de Jees Quito
Sirviendo en Emanuel de Cali, Colombia